Si tu empresa nunca ha usado una empresa de cobranza o recuperación de deuda, es posible que no estés seguro de cuándo es el momento adecuado o si, de hecho, es una solución para tu empresa. Pero si estás teniendo problemas para que tus clientes paguen y, a pesar de todos tus esfuerzos internos, no lo consigues, es posible que necesites ayuda profesional y experimentada.
1. No quieres contestarle a tus proveedores. Si tus cuentas por cobrar vencidas están afectando tu flujo de efectivo, en la misma medida que tus propias facturas están vencidas, es señal de que ya esperaste demasiado. No comprometas tus relaciones con tus proveedores. Es hora de buscar ayuda. 2. La cobranza te quita tiempo de las tareas que te hacen ganar dinero. Si te metiste en el negocio porque tienes ciertas habilidades e intereses. Pero cobrar deudas no está entre tus aptitudes, tienes a un aficionado haciendo el trabajo y estás perdiendo el tiempo, será mejor invertir para ganar dinero nuevo. Nunca cometas el error de ignorar el valor de tu propio tiempo. Una buena empresa de cobranza tiene verdaderos profesionales y te ahorra dinero. 3. Tu personal administrativo está frustrado con las cuentas por cobrar. Los administradores y la mayoría de los expertos en contabilidad no son necesariamente buenos para cobrar deudas. Los cobradores de deudas profesionales están altamente capacitados y tienen nociones específicas para cada tipo de recuperación de deuda, además saben cómo hacerlo rápidamente. Nunca vale la pena perder buenos administradores al cargarlos con un trabajo para el que no están calificados. 4. Tus vendedores juegan el papel de cobradores. ¿Qué es peor que hacer que un administrador cobre tus cuentas vencidas? ¡Darle ese trabajo a un representante de ventas! Tus vendedores son embajadores críticos para hacer crecer el negocio. Su papel es nutrir y construir relaciones, nunca incomodar a los clientes. Aún así, muchos dueños de negocios envían representantes de ventas para cobrar cuentas vencidas, y luego vuelven a pedir que estos vendedores cierren nuevos negocios. No es difícil ver la tensión aquí. Una empresa de cobranza es un tercero objetivo, que aporta una dinámica psicológica completamente diferente al cliente moroso. 5. Te preocupa no recibir ningún pago. Si las inquietudes acerca de que una deuda vencida sea incobrable te mantienen despierto por la noche, es hora de llamar a una agencia de cobranza. Confía en tu instinto: es probable que no seas el único acreedor en riesgo y que el negocio del deudor se esté quedando sin dinero y tiempo. 6. Los clientes se aprovechan de tus buenas intenciones. Muchos empresarios invierten mucho en relaciones comerciales éticas. El problema es que algunos compradores no lo son. Para sobrevivir, debes volverte igual de duro o asociarte con un compañero de cobranza agresivo pero ético. Al hacer esto último, puedes continuar fomentando relaciones sólidas con clientes mientras te concentras en tu negocio. Si quieres más recomendaciones, puedes acercarte a Coperva® o a nuestros expertos en recuperación de deuda, siempre podemos encontrar una solución a tus necesidades. Categorías
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